lunes, 26 de mayo de 2008

Hacia rutas salvajes




No pude dejar de sentirme parcialmente identificado cuando leí la breve sinopsis de la película. “El joven que harto de la hipocresía social, rechaza a la sociedad y los bienes materiales, y se adentra en la naturaleza para buscar las respuestas a esas preguntas espirituales que divagan en su mente”. Así, un día toma su mochila y se convierte en un trotamundos que llega a Alaska con el fin de vivir una temporada en un territorio salvaje e inhóspito, con el objetivo de conocer el estado natural del ser humano; esto, al ser uno con la naturaleza, vivir sin piscinas, sin mascotas, sin teléfonos, sin televisión, sin compañía y deshaciéndose de su dinero. Emprende su “gran aventura”. Solo, únicamente con la compañía de nueve libros, entre los que destacan autores como Tolstói, Jack London y Henry David Thoreau; lleva también algunos utensilios para cazar y la firme convicción de que 9 kilos de arroz le bastaban para alimentarse durante meses.


La película “Camino Salvaje” se basa en la novela de Jon Krakauer “Hacia rutas salvajes”, la cual, a su vez, se basa en la vida real de Christopher McCandless, el joven que al salir de la universidad, donó a una organización altruista los 24 mil dólares que en teoría destinaría para estudiar una maestría en Derecho, luego quemó el dinero que había en sus bolsillos y se fue hacia el norte caminando y haciendo autostop.

McCandless, quien emprendió el viaje bajo el pseudónimo de “Alexander Supertramp” (que sería algo así como “Alexander Super-trotamundos”) afirmaba que el hombre sólo puede conocerse a sí mismo al estar en su estado más natural, también decía que una vida estable es el veneno más poderoso para terminar con el espíritu aventurero del ser humano que es la esencia del alma. Por eso salió a la búsqueda de nuevas experiencias.

A lo largo del libro “Hacia rutas salvajes” llegué a concordar con muchas de las ideas de Alexander Supertramp, con sus feroces críticas en contra de un sistema social que fomenta la injusticia, el racismo y el despilfarro; con sus cuestionamientos en torno a la valía de los papeles y rolles de vida; con su gusto por la naturaleza. Sin embargo, no concuerdo con su idea inicial de que debemos desprendernos de las relaciones humanas, ni tampoco creo que emanciparse de la familia sea un símbolo de libertad…quizá sea porque él venía de una familia hipócrita y disfuncional, y yo no.

Alexander Supertramp es el ejemplo de la necesidad que tiene el hombre de nuevas experiencias, de ir más allá de sus horizontes, de inventar, de inventarse, de expandirse en el terreno físico pero también en el terreno ideológico y espiritual; es la necesidad que todos tenemos de descubrir nuevos territorios y nuevas experiencias…necesidad que en muchos de nosotros ya está muerta porque nos hemos adaptado a la comodidad de la vida citadina.
En lo personal, he pensado que sería divertido ser un trotamundos, pero, paradójicamente, me siento demasiado arraigado a mi familia como para intentarlo.

Como se informa al principio del libro y en la sinopsis de la película, Alexander Supertramp murió 4 meses después de adentrarse en Alaska, esto, al comer una planta que resultó venenosa. Ello ha llevado a diversos cuestionamientos a cerca de si un tipo como Alexander Supertramp es un idealista pensador soñador, o es un joven tonto que obtuvo lo que se merecía al intentar vivir de lo que le brinda la naturaleza, sin conocimientos de botánica.

La verdad, creo que “Camino salvaje” no es un película para todo público, no todos se sentirán conmovidos por el protagonista…es una cinta que, primero, me dejó un tanto pensativo, pero con el tiempo me surgieron preguntas al respecto, de tal suerte que me decidí a comprar el libro…y luego de leerlo vi de nuevo la película y observé esos pequeños detalles que en primera instancia pasan desapercibidos pero que luego de conocer la historia a fondo se convierten en elementos de alta carga emocional… y dan ganas de tomar una mochila y salir de viaje.

En su lecho de muerte, Alexander Supertramp volvió a ser Christopher McCandless y escribió en su diario que ese era su último viaje y que “La felicidad sólo es real cuando es compartida”. Llegó a esa reflexión luego de leer “Felicidad Familiar” de León Tolstói, eso hace pensar que posiblemente McCandlees pensaba volver a casa con su familia y perdonar el hecho de que su padre, que tanto promulgaba los valores, era un bígamo, y que Chris en realidad era un hijo bastardo; información que McCanlees conoció poco antes de entrar a la Universidad.

Alexander Supertramp era más que un simple hippie, era un tipo brillante y osado...también un poco ingenuo y con un fuego interno que no supo controlar…un tipo con ideas y valores que se ganó la inmortalidad a cambio de su propia vida. Algunos lo tachan de tonto al no tomar las medidas de supervivencia necesarias, como, por ejemplo, llevar un mapa; pero eso habría significado un vestigio de civilización para él, de tal forma que era como hacer trampa.

Como es de esperarse, aun cuando la película no pertenece al género comercial, una cinta siempre predispone que la contracultura se convierta en moda…Así que nos llenaremos de “Alexanders Supertramps” que no leen un libro ni por error y que no respetan a la naturaleza, nos llenaremos de “Alexanders Supertramps” que no tienen ni la más mínima idea de lo que él predicaba.

Vi esa película como pude ver cualquier otra, al salir del cine salí como salgo normalmente, pero con el paso del tiempo me he adentrado más en esta historia. La recomendé y ahora, junto con algunos de mis primos hemos creado una especie de culto en torno a “Hacia rutas salvajes”

El ser humano ama la naturaleza, es sólo que a veces se olvida de ello…el ser humano ama la libertad, es sólo que a veces cree que la tiene cuando en verdad es un esclavo…Hay personas que oyen voces extrañas en su interior, voces que van contracorriente, esas personas generalmente enloquecen o se convierten en hombres excepcionales.

Alexander Supertramp afirmaba que no se necesita un título universitario, pues el placer y conocimiento que otorga el estudio tienen valía por sí mismo, a este respecto, aseguraba que “El éxito profesional es un invento del SXX”.
Recuerdo que le pregunté a alguien que vio esa película “¿tú crees que Alexander Supertramp fue un tipo exitoso?”…muchos pensarán “cómo un vagabundo que se muere de una forma tan tonta va a ser exitoso”; otros creerán que sí fue exitoso, pues vivió su vida justo como quiso vivirla y sus letras e ideas han trascendido más allá de su muerte ¿cuántos pueden decir eso?



























COMENTARIOS:

ILICH: eso del saco tirado sobre el charco para que pase la chava sí es algo para pensarse. Y de hecho, no falta la mujer que aprovecha la situación para ejercer su manipulación sobre el hombre en esos casos. Es la otra cara de la caballerosidad, la mujer que se aprovecha de ello, aunque no todas son iguales. El Machismo es como el alcoholismo y todas esas patologías, generalmente quien las padece, no las reconoce, reconocerlas es el primer paso para salir adelante.

JIMMY: hay que amar a las mujeres por ser seres humanos, como dice Marco. El Machismo está tan arraigado que a veces no es identificado. Claro que las mujeres deben ser tratadas de una forma diferente, pero si en verdad queremos erradicar el machismo, hay cosas que deben cambiar

JOSÉ RUBÉN: concuerdo en que: si se van a poner a suspender a todos los jugadores que insultan y se burlan, pues no van a terminar nunca. Tú dices que la disciplinaria estuvo en lo justo porque le vas al Cruz Azul, pero si tomamos como parámetro las sanciones en el América- Cruz Azul, vemos que la disciplinaria actuó conforme a intereses particulares y eso es patético. Le dio miedo castigar….y la mejor prueba de que las sanciones fuertes funcionan, es que a Sabah le tiraron un golpe y un cabezazo y no respondió las agresiones, pues él ya había sido suspendido 6 juegos por algo similar. Ahora el equipo que avanza sabe que puede responder agresiones y no pasa nada. También creo que hay que valorar y respetar a todos los seres humanos, sin importar si son mujeres o niños. Dicen que “nos puedes evitar quién te gusta, pero sí puedes decidir cómo será tu relación con esa persona”

MARCO: es una contradicción, pedir igualdad y actuar de otra forma, creo que es una de las muchas confusiones sociales y de los muchos ejemplos de que actuamos según nos conviene. La diversidad es opulenta y enriquece la vida, que bueno que no seamos todos iguales y ojalá todos tuviéramos los mismos derechos, con todo lo que ello representa

PEDRO: me ha parecido exelente el recapitulado que haces con respecto a las mujeres. De hecho, creo que voy a publicarlo aquí. Hasta pronto